1457.- La cabeza alta y el paso cambiado15/12/2008
Les juro que ni un euro he perdido con Bernard, ese señor que fue vigilante de playa antes de ser el gestor preferido de las élites económicas de medio mundo. Madoff construyó su mentira financiera sin acordarse de mí, ¡qué rabia el ser tan pobre!
No es como lo del Real Madrid. En ese imperio mediático, gracias a un chico del “Humedal de Don Quijote” se está recuperando la moral, el perder con dignidad: “Nos vamos con la cabeza muy alta”, o sea, la honestidad higiénica y saludable. Juande Ramos es de un pueblo fundado en el siglo trece por Pedro Muñoz (el arcediano de Alcaraz) para recuperar terreno ante el ejército de la media luna.
Con dignidad, se disfrazan las derrotas y se camuflan los descalabros. Mejor eso que esconder las catástrofes como Maleni en el túnel desplomado del AVE. Que haya un derrumbe en El Regajal, situado en la provincia de Toledo, es algo que puede suceder; al fin y al cabo los túneles son contranatura. Que se oculten las desventuras no previstas es una candonga que ni colgando de la catenaria al personal.
¡Ay si hubiera podido silenciarse (una tapada y ya) lo del Prestige! Cuando aquello, un diputado socialista madrileño hoy en el machito zapateril, tras mantener una reunión con comerciantes en Aranjuez, soltó este impresentable disparate: “Estamos sobrados de votos. Pero si nos hacen falta más, hundimos otro Prestige». Ni un mes había pasado desde el hundimiento del barco en la costa gallega, el chapapote a flor de piel, y los compañeros de Antonio Carmona medio justificaban el desliz insensato del diputado: lo del Prestige fue en el 2002 y en el 2004 Antonio Carmona fue el único rival de Rafael Simancas por el liderazgo del Partido Socialista madrileño.
Remansado en la dignidad de la cabeza alta y el paso cambiado, cuando el Real Madrid conquistó hace unos meses el segundo título de Liga consecutivo, Lionel Messi, ese fenómeno, prefirió no comentar los planes de futuro que el club azulgrana estaba haciendo con vistas a la próxima temporada: “Esta campaña todavía no ha finalizado y lo primero es acabarla con la cabeza alta y jugando bien". Ahora que los muertos de entonces han resucitado, “El Barça acaba con el Madrid en una noche de miedo que tuvo un colofón glorioso”.
El de Pedro Muñoz, el "Humedal de don Quijote", además de dignidad busca un milagro, que, como en la melosona canción de Danny Driggsen: “Todo es posible si puedes creer, si tus ojos lo ven lo puedes hacer”.